martes, 19 de julio de 2016

SHAKESPEARE IN LOVE


Aquellas maravillosas Comadres de Windsor aún resuenan en mi memoria,ella es así.Sentencia,pule y hace molinillos de colores si es preciso para preparar su decorado.
Hoy, hace demasiado tiempo para nombrarlo,pero no para recordarlo.
Mi cabeza baja en el ascensor hasta el piso número trece,posando su mirada en el color verde de las entradas,que era el mismo de las paredes del colegio.
Una sacudida de viento me devuelve a la melena de Laura,que se ha transformado siguiendo la estela de uno de los New Kids on The Block. Creo que allí empezó todo.Fue como despertar de un ñoño letargo,todo.La música que escuchaban sus hermanos mayores la hice mía y sucumbí a la magia del teatro,alejada de películas para niñas en colegio de mezquinas monjas. Annie y Shirley Temple se cayeron por el hueco del ascensor que nos subía la comida putrefacta y que ahora fabricaba una contrata.
Sigo descendiendo un piso más y puedo ver desde el reflejo de  mi ropa,a las butacas de madera forradas de rojo a juego con las inmensas cortinas de terciopelo.
Regreso en un chasquido al patio de butacas que se levantaba al verles pasar,como si fueran el mismísimo astro rey.Allí de hecho un día lo fueron,aunque hoy casi nadie se acuerde o hayan quedado en meros amigos de una red cualquiera.
Todavía sonrío al ver las cortinas tapando la melena rubia de Nacho,que apenas  respiraba preso de un repentino pánico escénico.Saboreo el aroma  crujiente a madera,que al pisar el escenario hacía que nos desternilláramos.Allí fue,justo allí,donde nosotras empezamos a tejer aquella tela de araña,en la que rebotarían las dificultades.Allí,en la magia de un teatro.
Repetí varias veces,aunque no me atreví a pedir los consabidos autógrafos.De hecho,alguien lo hizo por mí sin que se lo pidiera.Yo era la misma y no.Llevaba vaqueros y el pelo suelto mezclados a partes iguales con la fórmula que me acompañará hasta el día en que me muera.
Quería también un papel,de eso también me acuerdo,e imaginaba pisar aquél suelo crujiente con cualquiera de los trajes que lucían tan bien,bajo aquellas luces que no eran de neón.
El escenario ,parecía estar hecho del material del protagonista de La mecánica del corazón,pero aún no estaba escrito.Faltarían.......años.
Allí comenzó todo,cuando mientras sonaba aquél famoso tema de Michael Bolton,decidimos que queríamos algo más que ser las protas de un videoclip de los años 80; y comenzó aquella manta tejida de parches,decorando los universos paralelos de aquellas Chicas de colegio.


11 comentarios:

  1. yo no tengo apenas recuerdos del colegio, aún menos del instituto...
    no se porqué ni cuando decidí saltarme aquellos capítulos de mi vida...
    besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues no serían ni malos ni buenos,mediocres que es lo que olvidamos.Pues tampoco pasa nada,seguimos por aquí relatando que tampoco está nada mal,aunque sean chorradas mil y una veces.Besazos

      Eliminar
    2. Pues no serían ni malos ni buenos,mediocres que es lo que olvidamos.Pues tampoco pasa nada,seguimos por aquí relatando que tampoco está nada mal,aunque sean chorradas mil y una veces.Besazos

      Eliminar
  2. Pues yo resulta que tengo todos aquellos años escritos. Sí, me dio el picotazo de empezar un diario con 11 años. Y, ¿qué quieres que te diga? Aún no he podido dejarlo.
    Así que, sí, los detalles de mis años de instituto están rellenando hojas y hojas de libretas de cuadros. Tb te digo que hay cosas escritas, con las que pienso:-"Porque está aquí escrito y me lo creo, pero vaya, que no me acuerdo de naíca de esto"-.
    :)

    Besos, Lorena!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso me pasa a mi y no tengo que remontarme a los 11 años. Pero es un gustazo releer cosas que pasaron y que no pasaron pero las escribiste igual. Y sentir...

      Eliminar
    2. Uy yo daría lo que fuera por cierto diario que en un cabreo gordo me cargué.Y no fue rabieta de niñata,tuve una adolescencia...que para mí se queda,creo que no quería recordar,pero ahora me gustaría tenerlo.Prefiero quedarme con recuerdos bonitos que me hagan pensar que no todo fue malo.Por desgracia tengo una memoria que no me gustaría tener...algo así como fotográfica que a veces es complicadilla la muy perra jajjajaj Muchos besos y a escribir,soñar y todo lo que nos haga felices

      Eliminar
    3. Y Bubo a veces tienes 11 años también jjajja No es tan malo!jajajja

      Eliminar
    4. Lorena, no fastidies... ¿Tú tb tienes memoria fotográfica? jajajajajajaj Mira, otra cosica en común, jamía. Mis amigos tb dicen que tengo "cienes y cienes de gigas" .. jajajajajaajaj

      Eliminar
    5. ummm...soy una especie de estas raras jajjajajja a veces es estupendo y otras no mola nada,pero sí"jamía"sí.Muchos besos y a almacenar en esos terabytes cosas bonitas!

      Eliminar
  3. Comadres de Windsor... ni la conocía. Tendré que buscar de nuevo a ver donde la encuentro.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jjajjajjajjaja no la encontrarás porque en las adaptaciones los títulos son libres.Muy divertida!

      Eliminar