Cuatro elementos

Salió siendo de madera robusta, firme y compacta, pero cuando las doce del mediodía aparecieron en el reloj de la plaza, se fue poco a poco produciendo la temida transformación, hasta llegar a papel cebolla transparente y sin protección . La madera pasó a serrín justo en el instante en el que se quedó desnuda, descalza y sin argumentos. Cuando en sus ojos de sueño permanente se dibujó aquél interrogante, cada día se desdobló en mitades y planos ,panales tridimensionales que engloban a otro y guardan todos los espacios sin resquicios por los que pueda apenas pasar el aire. Sabe que sólo puede esperar y aguantar las primeras lluvias ,mientras se despide de los rayos de sol; y bosteza,mientras se tiende en un banco a la espera de que una gota de lluvia o un rayo de sol ,de esos leves y suavecitos,la liberen al fin. Pero no de sus cadenas, sino de los tentáculos de la gente, de las garras de lo que los seres único guardan en su interior y que ella ve a efecto lupa, aunque ellos crean que no, ¡ incautos! Porque aunque todo gire , se caiga y desdoble en infinitos planos hasta el hecho de parecer irreal,ella se tambalea pero esconde los temblores bajo su gorro ,hasta que al final levita .Pero sólo pueden verlo las miradas limpias y claras. Y espera...y aguanta, atada a un mástil, hecho con sus canciones y sus letras escondidas en los libros,mientras los gatos en los tejados saben que en un rincón de algún sitio , él la espera expectante con la mirada serena y los brazos abiertos,para cuando puedan el tiempo y el espacio permitirles volver a ser.