CARACOLES DANZANTES

El verano no ha empezado pero se atisba.El gato huele el airecito con ese botón naranja aterciopelado que tiene a modo de nariz.
Yo voy a empezar a hacer una especie de catálogo de virtudes y defectos.Pero no de mí,porque ni me voy a vanagloriar ni a masacrar,es de las cosas,de lo que quiero hacer y lo que no.Soy perezosa,impaciente e inconstante.Lo mismo me entusiasmo que todo me parece una auténtica birria,como lo que escribo.Por ahí hay algo que creo que no está mal y aún no he encontrado ese espacio tiempo para publicar.
El caso es que aunque hoy no me siento querida por antiguos amores y es ya una realidad comprobada que cuando llamo para esa felicitación de turno que ya no sale natural ,pero que me cuesta cortar,siempre está apagado o fuera de cobertura y quizás me mandarán un ok o una respuesta en otro idioma.Las cosas se pasan,se desconexionan y punto.Ayer en cambio me sentí como nunca y querida como hacía tiempo no era posible.Ese formar parte de un algo ,ser tú y otra parte diferente y esencial que aporta lo que falta al igual que el resto en ese grupo de personas.
Se ha terminado mi taller de biodanza,pero aunque a algunas las veré poco por sus circunstancias,con dos de ellas se ha creado algo muy especial.A mí me gusta que me abracen y que me besen y que no de por hecho aquello de que me quieren,ayer lo sentí y me lo dijeron y fue una tarde noche muy feliz.Pero como no estoy acostumbrada ,pues hoy estoy con gripe y eso que se supone que esto fortalecería mi siempre dçebil sistema inmune.Se ve que necesito más dosis de esta medicina y sobre todo de tantas risas como ayer,es muy chulo que no te corten alas y que alguien se ría mucho contigo como hacía tiempo nadie lo hacía.
Pocas veces se siente uno tan cómodo,así que tendré que patentarlo como estilo de vida aunque todavía me cuesta bastante desaprender y aquello de generar nuevos patrones de pensamiento.Pero sí que es verdad que un poquito más he empezado a confiar en las personas,a pesar de tantas decepciones y a pesar de que a veces lo soy yo...con otros,pero sobre todo conmigo al volverme tan autoexigente.