martes, 11 de junio de 2013

AJOS FERMENTADOS
 
 
Últimamente duermo poco, me quedo esperando a que llegue mi chico contándome las mil y una historias que le pasan en el nuevo mundo que es ahora su trabajo. Apenas nos vemos, así que  hago tiempo hasta la hora que sea esperando mi cuento mientras leo o estiro las piernas mirando el cielo sobre la mesa de la terraza.
Lo de anoche dio para mucho, hoy todavía resuenan mis carcajadas y es que el mundo de algunas personas que debería ser fabuloso...es todavía peor que el mío, de tan poco que tienen dentro de ellos mismos.
Pues bien ,el niño consentido que tiene por jefe montó en cólera porque con todo el follón se dejaron una bolsa con ajos fuera y ya de ahí se fue haciendo la cadena y la pelota más grande. Aquello era poco más o menos que el hundimiento del  Titanic ; madre mía, gritos,patadas a las cajas y a todo lo que se le pusiera por medio, y el rubiales que es  guasón por naturaleza no daba crédito y tenía que aguantarse la risa. Entenderíamos que para alguien que apenas tiene medios una bolsa con ajos pues pueda ser una gran pérdida, pero no es el caso la verdad...Vamos, que me han dado ganas de darle yo una de mis bolsas de la nevera y plantarle un lazo para que deje tranquilos a sus pacientes empleados, pero claro, no son ecológicos y horror...son ajos blancos. Lo cual querría decir que lo mismo me la habría lanzado a la cara .Lo bueno de todo esto es que quizás sí me sirvan para algo más que para cocinar y ahuyente a los malos espíritus y a los vampiros que no es poco.

2 comentarios:

  1. No hay nada como "escudriñar" en las estupideces de los demás para tener un día tranquilo y sosegado. ¡Anda y que le den!

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  2. Eso,o al menos soltar unas risas y quedarte como nuevo.Esto promete!

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