sábado, 19 de septiembre de 2015

LA GATA TRISTE Y AZUL



De nuevo ha venido  a visitarme,ha bajado las escaleras del tercer piso y se ha echado con su túnica azul turquesa a los pies de mi cama.
La he ahuyentado por todos los medios porque implicaba demasiadas pelotas que sortear con mi diminuta raqueta.
A veces uno cree estar preparado y no lo está,pero hoy ,de sábado de final de verano y tras una mañana de altibajos ordenando trastos y sin pizca de música o color...la he invitado a café y a sentarse en mi sofá.
Es cierto que cuanto más te conoces y más observas,más aprecias a veces su compañía.
Alejada de todo lo supérfluo , de las personas mate que más me alejan de mi verdadero mundo y mi realidad.Bonita o fea...lúgubre o divina,mágica o terrenal;pero la mía en definitiva,que aunque no siempre me guste y demasiadas veces duela,me ha hecho estar donde ahora estoy y ser por dentro como quiero ser.
Seguimos trabajando las mejoras,quizás cuando roce la perfección haya pasado un siglo o dos y posiblemente no me encuentre por aquí...
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario