jueves, 27 de marzo de 2014

MUSARAÑAS Y MARAÑAS

Algunas veces es más sencillo y menos agotador no  demostrar nada. A veces el ego se queja, pero es que no podemos contentar a todos ;y mucho menos a él. No me sale escribir, no hay tinta y la inspiración se ha marchado de vacaciones con tantos días con la cabeza a la intemperie.
Hoy pienso, que siempre habrá palabras de más ...o de menos. La gente entenderá  lo que quiera y a veces será inevitable que no te entiendan cuando hablas en tu propia tierra, aunque no sea de Andalucía. De nuevo he empezado a mirarme las uñas, por si me estoy convirtiendo en algo que no veo, pero no. De momento todo parece extrañamente normal. Sólo están pintadas de color azul celeste, buscando un cielo de verdadera primavera,pero por lo demás son normales.
Pero ,esperad, que voy al espejo. De lejos , de cerca, una mueca. Nada...los ojos parecen simétricos y la nariz no se ha despegado de su lugar, así que me acerco. Lo que busco son unos bigotes de gato , porque todo acaba pegándose y últimamente me parezco tanto al que vive en casa...que no sé.
El caso es que me veo normal y eso no sé si me gusta o me disgusta; pero lo que sí es cierto es que aún no he perdido el acento en tantos años y a veces eso aún me ocasiona problemas; y a veces, sólo a veces, hablo demasiado deprisa y no sé cómo parar. Las palabras dormidas, calladas durante tiempo rebotan y se empujan unas a otras para brotar formando guirnaldas para decorar una estancia ,dependiendo del momento, de la mejor o la peor manera.

2 comentarios:

  1. La normalidad tiene doble filo...

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    1. A veces si y otras no,pero no voy a negar que pueda llegar a ser aburridisima,asi que...que fluya la imaginacion!

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